Iglesia evangélica Sühne Christi
Un impresionante símbolo y la advertencia de seguir alerta en la actualidad
Iglesias & religión
Lugares conmemorativos y monumentos
Lugares conmemorativos de la época del nacionalsocialismo
La iglesia Sühne Christi, inaugurada en 1964 cerca del Memorial Plötzensee, es un lugar de recuerdo a las víctimas del nazismo.
Durante la era del nazismo, en el norte de Charlottenburg había un temido patíbulo: el antiguo Centro penitenciario Plötzensee. Aquí se ejecutó a numerosos presos políticos del régimen nazi. En esta antigua cárcel, hoy un memorial recuerda los crímenes nazis. Además, a unos 3 kilómetros hacia el oeste se dedicaron 3 iglesias al recuerdo de esa funesta época de la historia alemana. Una de ellas es la Iglesia evangélica Sühne Christi, en la Toeplerstraße.
El moderno edificio de la iglesia, inaugurado en 1964, impresiona ya desde lejos debido a su característica forma hexagonal. Y justo al lado, se erige hacia el cielo un campanario independiente, blanco y de diseño sencillo con planta triangular y cuatro campanas de bronce. La luz del día baña el interior de la iglesia a través de las grandes ventanas, que llegan hasta el techo.
Recordatorio para las próximas generaciones
Desde el patio delante de la iglesia hasta el atrio transcurre un muro conmemorativo de color blanco. Con las inscripciones «Auschwitz», «Plötzensee», «Hiroshima» y «Muros» en su parte exterior, este muro recuerda los graves crímenes que los seres humanos han perpetrado contra los seres humanos. La parte del muro en el atrio de la iglesia lleva la inscripción «Gólgota», el lugar donde se crucificó a Jesús. De esta forma, el muro creado por el artista berlinés Florian Breuer ya sienta precedente, urge a estar alerta y recuerda a las víctimas. Justo delante del muro conmemorativo, además, hay una placa de hormigón en la que se citan las palabras bíblicas de advertencia que Dios dirigió a Caín: «¿Qué has hecho? ¡La voz de la sangre de tu hermano clama a mí desde la tierra!».
Espacio para la memoria y la oración: el interior de la iglesia
La nave de esta iglesia diseñada por el berlinés Hansrudolf Plarre es amplia y luminosa. Las grandes ventanas que llegan hasta el techo permiten dejar volar la vista hacia el exterior, hacia el cielo. La decoración de las sencillas paredes de ladrillo rojo simboliza tanto la franqueza como la fragilidad. Una galería flota sublime a un lado del espacio hexagonal y es precisamente el lugar donde se encuentra el enorme y moderno órgano del templo con sus 38 registros. El altar es de un sobrio blanco e impresiona con una sencilla cruz de piedra blanca con una corona de espinas.
Más información sobre el Sendero del Recuerdo, en el que se encuentra la Iglesia de la Expiación.