En Clärchens Ballhaus, con su ambiente de salón de baile de principios del s. XX, se celebran –rodeados del aroma de sus sabrosa cocina con Schnitzel y Frikadellen– veladas de tango, cursos de salsa y noches de swing. La clientela mayor ya sobrepasa los 80 años, aunque también frecuentan este nada pretencioso club clientes más modernos. La actriz Charlotte Rampling bailó aquí tango.
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