Neukölln en bicicleta

En este sencillo y variado recorrido, descubrirá Neukölln desde una perspectiva completamente nueva. Lejos de la cocina multicultural y los bares de moda, el distrito tiene historia y naturaleza que ofrecer. Hay numerosas oportunidades para hacer un alto en el camino. Tanto si desea hacer un picnic en el campo, desviarse a un mercado menos conocido o contemplar la arquitectura histórica de Neukölln, este recorrido combina lo mejor de todo.

La duración pura de este recorrido es inferior a una hora y media. Tenga en cuenta que hay pequeños tramos de la ruta en los que es mejor empujar la bicicleta. El recorrido comienza en la estación de metro Karl-Marx-Straße y termina en la estación de metro Rudow, desde donde podrá volver fácilmente en bicicleta al centro de la ciudad.

Mapa del recorrido

Aspectos más destacados del recorrido

Al comienzo de la excursión, pasará por Böhmisch-Rixdorf. Aquí se asentaron en 1737 varios refugiados protestantes bohemios que tuvieron que huir de la recatolización de su patria. Hoy es un barrio residencial céntrico y popular. Entre otras cosas, se pueden ver edificios de una sola planta que recuerdan el pasado del pueblo, así como la antigua herrería del pueblo. Se menciona por primera vez por escrito en 1624. Aquí se fabricaban y reparaban aperos de labranza, herramientas y herraduras. Incluso hoy en día, la herrería sigue abierta a los visitantes. De camino, pasará por el Jardín Cormenius, uno de los parques más singulares de Berlín. Fue inaugurado en 1995 y refleja las ideas del filósofo y teólogo bohemio Johann Amos Comenius.

El Körnerpark es otro punto destacado de esta ruta. Aquí podrá relajarse en la vegetación y visitar el invernadero para disfrutar de un café y sabrosos tentempiés. En verano, muchos berlineses extienden sus mantas de picnic en la zona verde para disfrutar del sol. A continuación, este recorrido le llevará hacia el norte, a las zonas menos conocidas de Neukölln. Sin embargo, éstas no están menos cargadas de historia. Visite la urbanización  de la Herradura, cuyo edificio homónimo fue construido a mediados de la década de 1920 por Bruno Taut y Martin Wagner. Poco después le espera un ambiente maravilloso en Schloss Britz. Le siguen otros edificios que documentan el pasado rural de Neukölln, como el histórico Molino Britz.  Merece la pena visitar el Britzer Garten, pero hay que pagar entrada. Tampoco está abierto a los ciclistas, así que hay que empujar la bici. El parque se creó en 1985 para la Exposición Federal de Jardinería, ocupa 90 hectáreas y ahora es una popular zona de recreo local. Por último, verá la famosa Gropiusstadt en su camino hacia Rudow, desde donde puede regresar al centro de la ciudad en transporte público.

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Consejos de los expertos

• Con su especial estructura de tierra y su forma orgánica, el Café am See del Britzer Garten parece sacado de una película de fantasía.
• En el Palacio Britz se organizan exposiciones temáticas temporales que merece la pena visitar.
• No lejos de la estación de S-Bahn y U-Bahn de Neukölln, merece la pena desviarse hasta Kranoldplatz, donde se celebran regularmente mercadillos y el mercado semanal DIE DICKE LINDA.