Monbijoupark

«Monbijou» significa «mi joya» en francés. La propiedad de casi cinco hectáreas cerca del río Spree fue considerada la más hermosa de Berlín. Era un palacio precioso donde vivía la reina prusiana, rodeado de un jardín lleno de setos ornamentados, naranjos, fuentes y esculturas. Con su muerte, el sueño había terminado. Federico II hizo sellar el palacio durante décadas en memoria de su madre. Bajo el mandato de Federico Guillermo II, Monbijou volvió a ser una residencia de verano, y desde 1877 funcionó como museo para los Hohenzollern. En la Segunda Guerra Mundial, el edificio fue destruido en un bombardeo. En la década de 1960, se sustituyó por una zona verde con piscina infantil, fuentes, instalaciones deportivas, descuentos y un paseo ribereño.

Hoy en día el Monbijoupark frente a la Isla de los Museos es un lugar agradable donde relajarse o tomar el sol. Hay pocos lugares tan agradables como este en el centro para un breve descanso.

Desde Monbijoupark también se puede llegar a la Isla de los Museos, Hackescher Markt y el Lustgarten.