Anti-Kriegs-Museum (Museo antiguerras)

El Museo antiguerras se inauguró en Berlín a principios de los años 20, después del fin de la Primera Guerra Mundial, mostrando su rechazo a la violencia y las guerras y demostrando con ello una gran valentía. Los nazis cerraron las instalaciones en 1933. Se intentó revivir el proyecto de nuevo desde el exilio en Bruselas, pero el ataque alemán de 1940 hizo que el museo quedara reducido a cenizas. Casi 40 años más tarde, el Museo antiguerras volvió a la vida como alegato contra la guerra donde podrá ver un refugio antiaéreo, juguetes de guerra y fotografías y documentos reveladores.

Pequeña exposición con piezas únicas

La idea de un Museo antiguerras en Berlín surgió de Ernst Friedrich, de Breslavia. En 1925, lo fundó en Alexanderplatz. Desgraciadamente, los nazis arrestaron a Friedrich durante un breve periodo de tiempo en 1933 y cerraron su museo. La SA lo convirtió en una cámara te torturas. El nieto de Friedrich, Tommy Spree, volvió a abrir el Museo antiguerras en 1982 en un antiguo edificio clásico de Berlín, típico del antiguo barrio obrero de Wedding. Muchas de las piezas expuestas son intencionadamente explícitas: las vitrinas están llenas de cascos de soldados con disparos, agentes de guerra y máscaras de gas. El refugio antiaéreo es muy realista, con un bastidor de cama oxidado de los días de la guerra. Las inscripciones en la puerta de un búnker histórico de Neukölln son testigo de las horas que las personas pasaban encerradas durante los bombardeos. Para mantener la calma, una mujer escribe en la puerta de metal la fecha y la hora de casi todas las alarmas que indicaban un ataque aéreo. El museo no se centra únicamente en la Segunda Guerra Mundial, sino que también exhibe fotografías de los heridos de la Primer Guerra Mundial, para destacar el horror de las guerras. En un mapa del mundo se indican todas las zonas en guerra actualmente. El arte expuesto en el Museo antiguerras es una protesta contra la violencia: las fotografías, escritos y pinturas se caracterizan por su lengua abstracto pero directo y son una llamada a la paz. El museo exhibe obras de Karl Kraus, Evelyn Sion y Kurt Tucholsky.

Esto le espera en el Museo antiguerras:

•     Un refugio antiaéreo conservado en su estado actual.
•     La puerta de un búnker de Neukölln con la fecha y hora de cada bombardeo.
•     La escultura de la paz "Destruir las armas" frente al museo.
•     Peace Gallery con arte en contra de la guerra.
•     Juguetes de guerra del siglo XX.

Memoriales de guerra en Berlín

El memorial de piedra del Dorotheenstädtischer Friedhof conmemora las víctimas de la Segunda Guerra Mundial y de los que lucharon en la resistencia. El monumento es muy sencillo e incluye los nombres de figuras notables como Karl Bonhoeffer, Hans Ludwig Sierks y Hans von Dohnanyi. La antigua Gedenkstätte Plötzensee es otro centro memorial, donde el régimen nazi ejecutó injustamente a cerca de 3000 personas entre 1933 y 1945. Hoy en día, la sala de ejecuciones es un espacio conmemorativo. En otras salas se ilustran las prácticas injustas del sistema judicial nazi.
Los monumentos conmemorativos recuerdan a las víctimas de la justicia militar nazi en Murellenberg, entre ellos desertores, objetores de consciencia e insubordinados. Los nazis establecieron una zona de ejecución de las fuerzas armadas en el desfiladero Murellen. Durante los últimos meses de guerra se pudo constatar la muerte de más de 200 soldados. 106 espejos de tráfico con una inscripción parcial sirven de memorial y aluden de forma simbólica a los delitos nazis que nunca fueron castigados.
A su vez, el Deutsch-Russisches Musuem se encuentra en el lugar donde las fuerzas militares alemanas se rindieron el 8 de mayo de 1945.

Recomendaciones para su visita

Para llegar al Museo antiguerras, bájese en la estación Seestraße de la línea U6 de metro o en la estación Leopoldplatz de la línea U9. Una vez allí, el museo está a poco menos de 15 minutos a pie. También puede coger las líneas de autobús 106 o 221 y bajarse en Antwerpener Straße o en la parada Seestraße/Amrumer Straße. Los conductores podrán aparcar sus coches en el aparcamiento de Müllerstraße. La entrada al museo es gratuita y abre también los lunes.

Horarios de apertura