Reinickendorf en bici

La visita, que dura aproximadamente una hora y media, comienza en la estación de metro Borsigwerke. Tenga en cuenta que en esta estación no hay ascensor. El recorrido finaliza en la estación de ferrocarriles interurbanos Wittenau, que sí cuenta con ascensor.

Entre estos dos puntos le esperan impresionantes monumentos industriales, mucha naturaleza a orillas del Lago de Tegel y en el Bosque de Tegel, algún que otro amiguito peludo y deliciosas galletas como recompensa. Planifique algo de tiempo para darse un baño, asombrarse y comer galletas.

Mapa del recorrido

Aspectos más destacados del recorrido

Nada más empezar el recorrido verá un impresionante monumento arquitectónico que data de la época de la industrialización: la fábrica Borsig. Aquí destaca, entre otros, la puerta Borsig, erigida en 1898. Más adelante, cuando se edificó la torre Borsig en 1922, una fecha relativamente tardía, el complejo fue el primer edificio alto construido más allá del centro de Berlín.

En el Lago de Tegel podrá disfrutar de un poco de naturaleza. Y en el paseo Greenwichpromenade, renovado íntegramente hace algunos años, merece la pena parar a tomarse un helado los días de verano. Cuando vuelva de darse un baño, no deje de visitar el Palacio de Tegel, también conocido como Palacio Humboldt. Se trata de una casa señorial construida por Karl Friedrich Schinkel que después fue la casa paterna de los hermanos Humboldt. Otro de los aspectos destacados de este recorrido es el denominado «Dicke Marie», el árbol más antiguo de Berlín.

Y para terminar la visita, la ruta pasa por la urbanización Märkisches Viertel, donde debería hacer una parada en la tienda de la fábrica Bahlsen y adquirir galletas y chocolate más baratos por tratarse de mercancía quebrada. La urbanización de edificios altos Märkisches Viertel data de 1974 y en su época fue considerada el buque insignia de la planificación urbana moderna, antes de que su imagen adquiriera una connotación negativa. Actualmente, esta imagen se ha revertido gracias a la implantación de numerosas medidas.
 

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Consejos de los expertos

• Amigos peludos: El sendero negro en el Bosque de Tegel transcurre frente a un cercado habilitado para jabalís, muflones y gamos. Si lo visita en la época del año adecuada, hasta podrá ver a los adorables jabatos.
• Patos al agua: Si le apetece darse un baño, lo mejor es la playa del Lago de Tegel, donde podrá disfrutar de arena blanca y hasta un tobogán acuático.